Una más de las lacras de nuestro estado, de nuestras administraciones, es su demora en pagar a los proveedores. Esto es sangrante, y más si cabe en la actualidad, pues las restricciones crediticias impiden a los empresarios dependientes de estos pagos financiar sus gastos corrientes mientras los reciben, por lo que les lleva a la quiebra y desaparición. Y, claro, a incrementar las listas del paro.
El problema es el cash: ¿de qué vale anotar unos ingresos que no se consuman? Sí, vale, en algún momento se percibirán. Pero, ¿cómo hace el empresario para pagar mientras tanto a sus empleados, la luz y el teléfono? Antes el banco le daba crédito (imagino) contra la garantía del pago de la administración, pero ahora no lo hace. Así que en cuanto se retarda el pago más de lo habitual, pocas salidas quedan a los proveedores de la administración.
Pero, siendo esto tan dañino para la economía, ¿por qué lo hacen estos irresponsables? La respuesta es que no tienen dinero, esa es la directa. Pero lo cierto es que sus presupuestos se supone que casan ingresos y gastos, por lo que el pago se debería producir durante el ejercicio, a menos que estén muy mal hechos los presupuestos.
Lo cierto es que retrasar los pagos a los proveedores es otra forma más de financiarse, como bien saben los contables. Retrasando estos pagos, en el fondo, se incurre en un déficit no contabilizado.
No se olvide: los déficits de caja hay que cubrirlos de alguna forma. Si estoy gastando más de lo que ingreso, quedo a deber dinero a alguien. Puede que se lo deje a deber a un banco en forma de deuda, o puede que se lo deje a deber a un amiguete al que se lo devuelvo mañana, o que le pague al de la tienda dentro de 15 días. Pero se lo debo a alguien.
Lo bueno es que retrasando estos pagos, las administraciones (ayuntamientos, gobierno, CCAAs) no incurren en déficit oficialmente, y sin embargo son capaces de expandirse de forma subrepticia.
Veamoslo con un ejemplo: supongamos unos gastos de 1100 Euros y uno ingresos de 1000. Tenemos un déficit del 10%, 100 Euros que gastamos más que ingresamos. Este sería el déficit que reconoce nuestra administración, si se hacen todas las operaciones de cash en el ejercicio.
Pero imaginad que se retrasa el pago de otros 100 Euros. En este caso, con los mismos ingresos de 1000 Euros, se pueden gastar en este ejercicio 1200 Euros, 100 de déficit normal y 100 de financiación atípica por retrasar el pago, que ya serán pagados con cash del ejercicio siguiente.
Conforme se aumenta el plazo de pago, más dinero queda financiado de esta forma. Lo que trato de decir, en suma, es que por esta vía parece que las administraciones españolas tienen un déficit muy superior al oficialmente reconocido.
Si tenemos en cuenta que el previsto para fin de este año es del 10% (del PIB), da verdadero pánico tratar de estimar cual puede ser el verdadero.
4 comentarios:
Ferhergón,
Tendría que mirarlo, pero creo que esta es la diferencia entre el déficit de caja y el de contabilidad nacional. El de contabilidad nacional debería incluir todos los compromisos adquiridos por la administración, se hayan pagado ya o no. Me fiaría bastante de los datos de contabilidad nacional de las cuentas del Estado (central), pero no se hasta que punto se puede fiar uno de los números que dan el resto de las administraciones públicas, números que para empezar van con tres meses de retraso y se publican sólo de forma trimestral (los de las cuentas estatales se públican mensualmente).
Puedes encontrar los enlaces a la sección de datos del IGAE del Ministerio de Economía y las estadísticas del Banco de España en mi blog.
"Esto es sangrante, y más si cabe en la actualidad, pues las restricciones crediticias impiden a los empresarios dependientes de estos pagos financiar sus gastos corrientes mientras los reciben,"
¿Está ud defendiendo el crédito fácil? Si es así, me temo que eso no es una medida liberal.
"por lo que les lleva a la quiebra y desaparición. Y, claro, a incrementar las listas del paro."
¿Y?
¿Qué es lo que acelera su pulso, Ferhergon, para escribir cosas así? Todos somos conscientes de los problemas que sufren los empresarios en España.
Tienen todo mi apoyo, desde luego, pero de ahí a defender el acceso al crédito fácil me parece vergonzoso de su parte y eso es lo que he entendido de su primer párrafo.
Me hace un poco de gracia que por una parte usted haya criticado el acceso libre al crédito, por culpa ciertamente de políticas socialistas, mientras que ahora nos empuja propaganda crediticia en esta entrada.
Ahora sobre el Estado: en eso sí estoy de acuerdo pero en última instancia la culpa es en muchas ocasiones de las empresas que dependen de esos mismos organismos estatales.
Yo no veo que se quejen cuando reciben subvenciones por contratar a mujeres, discapacitados e incompetentes de todo tipo en muchas ocasiones -- pues ahora les toca aguantar.
Gracias por los comentarios.
Bsanchez, gracias por la clarificación. Tengo para mi que oficialmente no se reconocen esos retrasos de pago, porque supondrían el reconocimiento de que infringen sus propias normas.
Alfredo, no defiendo, ni mucho menos, el crédito fácil. Simplemente digo que esas empresas se habían acostumbrado a cubrir los desfases de pagos de la administración accediendo al crédito bancario. En ausencia de este, se ve que el sistema no es sostenible.
Por cierto, te agradezco el tono con el que intervienes hoy. Creo que así las discusiones pueden ser más constructivas y permitir que todos nos enriquezcamos con nuestras ideas.
Ah, bien: ahora sí estamos de acuerdo: el sistema socialista no es sostenible. Me agrada esa aclaración pues había interpretado su entrada de otra forma.
Sobre mi tono, pues no sé, yo lo veo igual -- será que hoy estoy algo más enfocado tras el brindis de la tarde.
Saludos
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