jueves, 18 de diciembre de 2008

El crédito también es un recurso escaso

Todos los esfuerzos que hagamos por tratar de dar a entender lo que significa que el Gobierno imprima billetes o baje los tipos de interés, creo honestamente que son pocos. Hay muchos que, siguendo un misticismo inexplicable, se piensan que así se puede llegar a solucionar algo; que creen que el dinero, un papel, equivale a la riqueza. Y que los bancos centrales pueden crear riqueza con una imprenta.

Es obvio que no es así, y el mero enunciado anterior debería despejar las dudas. Pero no lo hace. En otras razones, porque tenemos un ejércitos de economistas, funcionarios y periodistas dedicados full time a enredarnos con el absurdo de que eso vale para algo. Son el corifeo de los políticos, que necesitan de esta confusión para hacernos creer sus mentiras.

Vamos a verlo con otra metáfora, a ver si alguno más lo entiende. El crédito es un recurso escaso. En cada momento, solo hay una determinada cantidad que la gente quiere prestar. Esto creo que es indiscutible. En este sentido, es como el petróleo.´

Supongamos que el Gobierno, preocupado por la escasez del petróleo, decidiera que se necesita más. Y ni corto ni perezoso, le añadiera un 10% de agua. En el corto plazo, todos estaríamos mucho mejor, claro. Hay más "petróleo", es más barato, podemos viajar más. Hombre, el rendimiento habrá bajado un poco, pero tampoco se notará demasiado.

Claro, el Gobierno ve que el truco funciona, y decide ir añadiendo cada año un poquito más de agua. Es claro que cada año hay menos petróleo real disponible, aunque haya más "petróleo" aguado a disposición de la gente. Pero bueno, los coches siguen funcionando, y todos tan felices.

Es evidente que llega un día en que aquello no da para más. Llenas el coche con el petróleo "aguado" y este ya no funciona. Ese día te das cuenta de que, aunque crees tener gasolina, es mentira. Solo un 10% de lo que crees ser gasolina lo es, el resto es agua. Y por eso el coche ya no funciona. Se ha pinchado la burbuja.

De repente, la gente ya no se cree lo del petróleo, y deciden guardar sus reservas. ¿Qué se le ocurre al Gobierno paea solucionar el problema? Seguir echando más agua y más agua, a un petróleo que ya no vale para nada. ¿Alguien cree que así solucionará el problema?

Pues lo mismo, casi lo mismo, ha pasado con el crédito y el ahorro. Como el ahorro es escaso, el Gobierno se empeño en aguarlo con dinero falso, para que todos tuvieramos la sensación de que había más crédito disponible. Con los años, el verdadero ahorro, el que sirve para créditos, ha quedado tan aguado, que ya no nos atrevemos a decir si existe o no.

¿Y cómo propone solucionarlo el Gobierno? Aguándolo aún más, para que parezca que existe.

En el primer ejemplo, los coches no volverán a funcionar; en el segundo... ya veremos lo qué pasa.

1 comentario:

Pablo dijo...

¡Hombre! ni Carlos Rodriguez Braun pone tan a huevo sus adivinanzas ecónomicas:

Ferhergon:

"...los coches no volverán a funcionar; en el segundo... ya veremos lo qué pasa."


Respuesta:

El gobierno se quedará con los coches y, a través de las 8000 millones de euros que se les regala a los ayuntamientos, se "contratará" a desempleados para "montar y desmontar el coche"(me encantó este post).

Posteriormente, el señor Zapatatero (aconsejado por el señor Sebastian) predecirá, cual oráculo, la bajada del paro sobre abril o mayo ( coincidiendo con el comienzo de la campaña de las Elecciones Europeas de junio del 2009, ¡toda una casualidad!).


Corolario: ¡viva el cortoplacismo keynesiano !

Epilogo del corolario:la gente se lo cree todo

Moraleja del epilogo del corolario: Si sigo en el poder que más da que me cargue el coche


un saludo