lunes, 14 de mayo de 2018

Li Fu, de Pietro Grieco

Ya anticipo que el libro al que dedico esta entrada es extraño, y su lectura arriesgada, aunque como es corto, lo único que puedes perder es algo de tiempo.
 
En primer lugar, se trata de una poesía o un romance. Ya de por sí esto es sorprendente en los tiempos que corren. Hay pocos libros de poesía nuevos, y normalmente se trata de colecciones de poemas, no de un romance. En este caso, se narra la historia de Li Fu, el campesino poeta.

Si de por sí la publicación de poesía es algo raro, aún lo es más que se trate de poesía siguiendo las convenciones chinas. Pero ese parece ser el caso del libro que nos ocupa. Hasta cierto punto, es más normal si dichas poesías son consecuencia de la traducción de poemas en chino.
 
Pero no parece ser el caso. Así que nos encontramos con el tercer elemento especial. Si no me equivoco, se trata de una poesía estilo chino original del autor, y escrita en castellano. En fin, un rizo bien rizado.
 
Dicho esto, ocurre que mi sensibilidad no es la adecuada para disfrutar de esta literatura. Conste que lo había intentado en el pasado: he leído algo de poesía china, y terminé desechando su lectura, no por el mérito de dicha poesía (que no estoy en condiciones de discutir), sino por la imposibilidad de hacer una traducción mínimamente seria. Piense el lector que dicha poesía se escribe con los ideogramas chinos, lo que a su vez es parte de la poesía. No en vano nos dice Pietro Grieco un par de veces que "El poeta chino pinta la poesia y el pintor chino escribe la pintura", en la que es quizá la mejor frase del libro.
 
Quien lea este romance, tendrá todo el rato la sensación de estar leyendo una traducción, pese a que, como digo, no creo que lo sea. Las reglas formales se me escapan, pese a la introducción que dedica el autor a explicarlas, y sinceramente no soy capaz de valorar ni ritmo (rima no hay) ni estilo ni nada. Por ejemplo, tengo la sensación de que la ruptura de las frases en versos es arbitraria, cuando quizá no sea así.

Por otro lado, hay que reconocer que el autor hace esfuerzos ímprobos por trasladar elementos formales chinos al castellano. Por ejemplo, en estos dos versos, la lectura puede ser horizontal y vertical (!)
" Remolinos Remolinos Remolinos
  Ascienden Descienden Ascienden"

Otro verso digno de mención:  "Des-cubre A-lumbra Des-lumbra". Quizá el lector atento pueda descubrir más de estos elementos estilísticos.
 
En cuanto al fondo, también traigo dos ejemplos:  "La despedida es una muerte fuera del tiempo"
O: "El que sabe ver
      En todo ve poesía" 
 
El romance está precedido por un largo prefacio, que de hecho ocupa un tercio del libro, explicando el estilismo de la poesía china, así como sus etapas históricas. Entre otras cosas, aprenderemos que la poesía china tiene unos 3000 años más de historia que, por ejemplo, la castellana, y precede por otro milenio a Homero. O que la época de oro se corresponde con la dinastía Tang. O que hacer poesía era requerimiento para poder ser funcionario. 
 
Por último, atención a algunos de los nombres que aparecen en el romance, que parecen de broma: a un chino malcarado, le ha llamado Fe Ho Te, y a una guapa damisela, Lin Da (conste que me di cuenta al leer el apéndice).
 
En suma, termino como empiezo: se trata de una obra muy rara y arriesgada, y el lector que se adentre en esta maraña deberá estar preparado para la indiferencia causada, quizá, por no saber apreciar el arte que se le propone. Aunque también podría ser, simplemente, por que la obra no es buena.


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