viernes, 29 de enero de 2016

El Rompehielos, de Viktor Suvorov

Ensayo histórico que propone un causante alternativo para la Segunda Guerra Mundial, escrito por un insider ruso. Lógicamente, la teoría ha sido calificada como revisionista y cuenta con poco predicamente. Sin embargo, el libro es persuasivo y está bien argumentado.

Ya he comentado aquí "Sleepwalkers", donde la tesis es que la Primera Guerra Mundial fue impulsada por los franceses, más que por los austriacos o los alemanes. Pero lo cierto es que la historia la escriben los vencedores, y la verdad es que cada vez soy más esceptico sobre las tesis oficiales, máxime si van a favor del ganador.

Este libro tiene el mismo problema. La tesis principal es que la Segunda Guerra Mundial fue impulsada por Stalin, y no tanto por Hitler. En realidad, es como el "Archipiélago Gulag", pero aplicada al origen de la guerra. La obra de Aleksandr Solzhenitsyn nos descubrió la cruda realidad de los campos de concentración en la antigua URSS, cuando parecía que solo los nazis se habían dedicado al tema. Ahora (mejor, en 1992), Suvorov nos muestra como fue Stalin quien estuvo desde el principio impulsando que hubiera otra guerra mundial, con el objetivo de debilitar a los gobiernos democráticos y provocar la revolución socialista en todos ellos.

Y para ello necesitaban un "Rompehielos" que desestabilizara la precaria situación resultante de los tratados de Versalles. Esa figura fue la Alemania de Hitler, de hecho a Hitler le llamaban "El rompehielos".

La verdad es que el libro está escrito de una forma algo sensacionalista, lo que no quiere decir que no tenga rigor, ni mucho menos que sea aburrido. Este libro no se lee, se devora, es apasionante.

Entre los temas que mejor domina Suvorov está el del arte de la guerra, y son los pasajes relacionados con los "errores" tácticos cometidos por los soviéticos al principio de la guerra los que más interesantes me están resultado. Así, habla de la necesidad de tropas de reserva para ganar batallas, o de las tácticas de defensa frente a las de ataque a la hora de dotas las fronteras. Todo ello, para demostrar que estos errores no podían ser tales, sino que tenían que venir de que el objetivo de los soviéticos no era defender, sino atacar.

Suvorov describe cuerpo a cuerpo cómo la estrategía militar era de ataque, y no de defensa. Así se refiere al cuerpo de paracaidistas (sorprendente saber que la URSS era lides superaventajado en estos cuerpos, más después de haber leído lo que cuesta prepararlos en "Band of Brothers", flotilla fluvial, defensas,  puentes, localización de los cuerpos de montaña...

La verdad es que uno empieza entusiasmado por lo interesante de las descripciones, pero termina un poco asfixiado por la prolijidad del análisis. Llega un momento en que lo único que quieres es que avance, porque ya has aceptado la teoría y no necesitas más y más pruebas. Desafortunadamente, no hay más avance porque el libro se detiene aquí: en demostrar que en el momento en que se iniciaron las hostilidades, Alemanía lo hizo a la desesperada, pero pillo a la URSS en calzones porque estaba preparándose para el ataque y no para la defensa.

Muy interesante es la descripción de los indicadores usados por los soviéticos para anticipar el previsible ataque de los alemanes: como necesitarían millones de abrigos de oveja, un indicador era el precio de la carne de oveja respecto al de la lana; como el aceite para las armas debería resistir baja temperaturas, también se analizaban los trapos de limpieza usados por los soldados alemanes.

Pues bien, ninguno de estos indicadores fue capaz de identificar que Alemanía iba a lanzar su ataque, lo que demuestra que la Wehrmacht no estaba preparada y que por tanto fue un ataque desesperado ante la amenaza de la ofensiva soviética.

En fin, aquí lo dejo. Pero que nadie pierda de vista las consecuencias que tendría aceptar que la guerra la empezaron, aunque no formalmente, los soviéticos. Sobre todo, para los países de Europa del Este que quedaron incorporados a su dominio.

 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

No se,pero Stalin,ante el ataque de los alemanes,estuvo escondido en su casa,sin saber que hacer,hasta que decidio contraatacar.No parece que estuviesen preparandose para mucho.

Ferhergón dijo...

Según Suvorov, eso es precisamente propaganda soviética para escurrir el bulto de la culpabilidad de Stalin en el tema. Dedica capítulos y capítulos a aclarar que de eso nada.

El hecho es que, siempre según Suvorov, estaban preparándose para la ofensiva, pero no contaban con que Hitler se les adelantara. Como ilustra bien el autor, los preparativos son completamente distintos, y es relativamente fácil arrasar a un ejército que está preparándose para el ataque y no para defender. De hecho, si el que se hubiera anticipado hubiera sido Stalin, como los alemanes estaban en la misma tesitura, hubieran llegado a Berlin en días.

Según Suvorov, Hitler atacó a la desesperada y por eso no pudo seguir su ofensiva en el este. La alternativa que veían era perder los campos de petróleo de Rumania ante los rusos y perder la guerra inmediatamente.

Te animo a leerlo, Anónimo, luego nos cuentas.

JFM dijo...

Te aconsejo leer el Stalingrad y el "Joukov" de Jean Lopez. Ambos en Francés problemente no traducidos pero ambos en versión electrónica.

El Joukov porque Joukov era por aquel entonces el Jefe del Estado Mayor. La verdad es que en los wargames se suponía que por aquello del espíritu revolucionario una división soviética valía dos alemanas. Entre otras cosas hizo que al principio de la guerra los soviéticos no supiesen defender. (David Glanz, analiza de sus librso la mejora de la técnica defensiva sovietica) También es cierto que los soviéticos barajaron planes de ofensiva a los que acabaron renunciando.

Barbarossa no fue ninguna acción desesperada sino que los Alemanes ^pensaban liquidar el Ejercito Rojo en seis semanas. Esa es la razon por la qu no prepararon ropa de invierno. Otro detalle: en 1941 Alelmania gasta dos veces mas en construir submarinos que en construir tanques: eso no es lo propio de un mpais que teme a una adversario terrestre.

En cuanto a que Stalin propiciase la ofensiva alemana soy muy pero que muy esceptico. Es verdad que pensaba sacar tajada del debilitamiento de francese ya alemanes y que fue sorprendido por la rápida victoria alemana pero que una invasión estuviese en sus planes pues lo dudio.

Para empezar la URSS estuvo por dos veces al borde del colapso: la primera vez cuando los almenes llegaron alas afueras de Moscu. Todas las vias férreas iban a Moscu. Perderle hubiese hecho imposible trasladar tropas de un punto a otro ademas de las graves consecuencias industriales.
La segunda vez fue durante Stalingrado. La poblacion de lo que queda de la URSS es inferior a la poblacion alemana, la produccion industrial dos o tres veces menor, la racion es inferior a dos mil calorias porque las tierras fertiles estan en manos alemanas. Tambien minas y centrales electricas. Y Stalingrado es la ultima ciudad ruso. Después son los tartaros, kalmucos y demas. El moral esta por los suelos y hay síntomas de disgregación. Vamops que los Alemnes tuvieron que mponer de su parte y mucha para perder la guerra. Una de ellas las salvajadas que perpetraron contra los prisioneros y la población civil. Por ejemplo los oficiales tiene carta blanca sobre castigar o no castigar la violación. La mayoria no lo hizo. En 1941 ni los soldados demuestran mucho espiritu combativo ni a los civiles les duelen prendas por ver llegar a los Alemanes. En 1942 los bosques se llenaron de partisanos y en Stalingrado los soldados luchan como demonios.

El problema con los libros revisionistas y esto tambien vale a proposito de Pearl Harbor, siempre parten de la idea que el escenario historico es el peor posible pero en realidad tanto a la URSS como a EEUU podria haberles ido mucho peor si sus enemigos hubiesen cometido menos errores.